Un altísimo porcentaje de satisfacción por parte de las personas que lo han probado por su gran eficacia en la pérdida de peso, - hasta 30 kilos en medio año-, hacen del Balón Intragástrico el mejor aliado contra la obesidad, sin pasar por el quirófano.
Tras años de implantación en las clínicas de Corporación Dermoestética, el Balón Intragástrico se confirma como una técnica sumamente eficaz en adelgazamiento sin cirugía. Muchos han sido los pacientes que han decidido someterse a este sistema contra la obesidad, con un alto grado de satisfacción. Al proporcionar una sensación continuada de saciedad, facilita el seguir una dieta que elabora el nutricionista de la clínica, de manera personalizada, para cada paciente. Con el Balón Intragástrico se puede llegar a perder hasta 30 kilos en 6 meses.
Sin cirugía
La gran ventaja de este sistema respecto a los tratamientos tradicionales contra la obesidad es que las personas que padecen este problema pueden enfrentarse a él sin necesidad de someterse a una operación de cirugía y, lo más importante de todo, con un alto índice de satisfacción y de tolerancia.
Sensación de saciedad
Basta con una sencilla endoscopia, con la que se introduce un Balón Intragástrico de silicona de alta calidad deshinchado. Una vez ubicado en el estómago se rellena de suero fisiológico. El balón queda asimilado perfectamente, produciendo una notable disminución en la percepción de hambre y aumentando la sensación de saciedad.
El procedimiento, que suele durar entre 20 y 30 minutos, se lleva a cabo con anestesia tópica en la garganta y con sedación. El balón permanece alojado en el estómago un máximo de seis meses, tiempo en el que el paciente realiza una vida absolutamente normal. También es cierto que se puede retirar antes si se logra el objetivo deseado de pérdida de peso. Transcurridos los seis meses, el balón se retira de la misma forma que se introdujo: por un especialista de Corporación Dermoestética, quien una vez vaciado procede a extraerlo por vía oral.
Atención 24 horas, control exhaustivo
Una de las características que distingue a Corporación Dermoestética del resto de clínicas que realizan este mismo tratamiento es el control exhaustivo que realiza de cada paciente, como si de un “Servicio de Urgencia 24 horas” se tratara. Una vez se implanta el Balón Intragástrico, el paciente está bajo supervisión médica todo el proceso, aunque su colocación sea ambulatoria, sin ser necesaria hospitalización. Se realizan siempre pruebas de control previas y se realiza un examen del aparato digestivo del paciente, pues este tratamiento está contraindicado a personas con problemas gástricos. Así mismo, una vez quitado, el especialista sigue viendo al paciente para ver su evolución.
En Corporación Dermoestética existen unas pautas muy regladas en cuanto al perfil del paciente del Balón Intragástrico, por tratarse de un tratamiento que sólo se implanta por razones de salud y no estéticas, ya que para éstas últimas, nuestras clínicas tienen otros tratamientos más eficaces.
Reeducación en hábitos saludables
No obstante, es fundamental seguir la dieta que realiza el especialista para cada paciente y, sobre todo, modificar los hábitos nutricionales para lograr mantener los resultados una vez retirado el Balón Intragástrico. Una reeducación alimentaria garantizará que se sigan unas pautas saludables en la alimentación durante y después del tratamiento y de forma perdurable.
La dieta que deberá seguir el paciente es individualizada, ya que se calcula teniendo en cuenta sus necesidades nutricionales, su estado físico, patológico y sus preferencias gastronómicas, aportando todo aquello que el organismo necesita.
Si se sigue la dieta, se perderá peso de forma progresiva y constante, alrededor de un kilo por semana. Con este sistema, se puede llegar a perder de 10 a 30 kilos en seis meses.
CLAVES DEL BALÓN INTRAGÁSTRICO
- Evita las posibles complicaciones de la cirugía bariática
- Potencia la eficacia de la dieta
- Al perder peso de forma progresiva, 1 kilo/semana aprox., motiva al paciente
- Reeduca al paciente en hábitos saludables
- La dieta es personalizada
- Se pueden llegar a perder hasta 30 kilos en medio año
- Control exhaustivo, tanto antes como una vez retirado
- Al tratar la obesidad, también se incide sobre otras enfermedades asociadas, como hipertensión, diabetes y colesterol
Tras años de implantación en las clínicas de Corporación Dermoestética, el Balón Intragástrico se confirma como una técnica sumamente eficaz en adelgazamiento sin cirugía. Muchos han sido los pacientes que han decidido someterse a este sistema contra la obesidad, con un alto grado de satisfacción. Al proporcionar una sensación continuada de saciedad, facilita el seguir una dieta que elabora el nutricionista de la clínica, de manera personalizada, para cada paciente. Con el Balón Intragástrico se puede llegar a perder hasta 30 kilos en 6 meses.
Sin cirugía
La gran ventaja de este sistema respecto a los tratamientos tradicionales contra la obesidad es que las personas que padecen este problema pueden enfrentarse a él sin necesidad de someterse a una operación de cirugía y, lo más importante de todo, con un alto índice de satisfacción y de tolerancia.
Sensación de saciedad
Basta con una sencilla endoscopia, con la que se introduce un Balón Intragástrico de silicona de alta calidad deshinchado. Una vez ubicado en el estómago se rellena de suero fisiológico. El balón queda asimilado perfectamente, produciendo una notable disminución en la percepción de hambre y aumentando la sensación de saciedad.
El procedimiento, que suele durar entre 20 y 30 minutos, se lleva a cabo con anestesia tópica en la garganta y con sedación. El balón permanece alojado en el estómago un máximo de seis meses, tiempo en el que el paciente realiza una vida absolutamente normal. También es cierto que se puede retirar antes si se logra el objetivo deseado de pérdida de peso. Transcurridos los seis meses, el balón se retira de la misma forma que se introdujo: por un especialista de Corporación Dermoestética, quien una vez vaciado procede a extraerlo por vía oral.
Atención 24 horas, control exhaustivo
Una de las características que distingue a Corporación Dermoestética del resto de clínicas que realizan este mismo tratamiento es el control exhaustivo que realiza de cada paciente, como si de un “Servicio de Urgencia 24 horas” se tratara. Una vez se implanta el Balón Intragástrico, el paciente está bajo supervisión médica todo el proceso, aunque su colocación sea ambulatoria, sin ser necesaria hospitalización. Se realizan siempre pruebas de control previas y se realiza un examen del aparato digestivo del paciente, pues este tratamiento está contraindicado a personas con problemas gástricos. Así mismo, una vez quitado, el especialista sigue viendo al paciente para ver su evolución.
En Corporación Dermoestética existen unas pautas muy regladas en cuanto al perfil del paciente del Balón Intragástrico, por tratarse de un tratamiento que sólo se implanta por razones de salud y no estéticas, ya que para éstas últimas, nuestras clínicas tienen otros tratamientos más eficaces.
Reeducación en hábitos saludables
No obstante, es fundamental seguir la dieta que realiza el especialista para cada paciente y, sobre todo, modificar los hábitos nutricionales para lograr mantener los resultados una vez retirado el Balón Intragástrico. Una reeducación alimentaria garantizará que se sigan unas pautas saludables en la alimentación durante y después del tratamiento y de forma perdurable.
La dieta que deberá seguir el paciente es individualizada, ya que se calcula teniendo en cuenta sus necesidades nutricionales, su estado físico, patológico y sus preferencias gastronómicas, aportando todo aquello que el organismo necesita.
Si se sigue la dieta, se perderá peso de forma progresiva y constante, alrededor de un kilo por semana. Con este sistema, se puede llegar a perder de 10 a 30 kilos en seis meses.
CLAVES DEL BALÓN INTRAGÁSTRICO
- Evita las posibles complicaciones de la cirugía bariática
- Potencia la eficacia de la dieta
- Al perder peso de forma progresiva, 1 kilo/semana aprox., motiva al paciente
- Reeduca al paciente en hábitos saludables
- La dieta es personalizada
- Se pueden llegar a perder hasta 30 kilos en medio año
- Control exhaustivo, tanto antes como una vez retirado
- Al tratar la obesidad, también se incide sobre otras enfermedades asociadas, como hipertensión, diabetes y colesterol
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