Dos gigantes que tradicionalmente no habían tenido nada que ver con la telefonía móvil se enfrentan por el dominio del mercado de la nueva generación de terminales. ¿Quién ganará? Te damos algunas pistas.
Está llegando al mercado el T-MObile G1, el primer teléfono móvil con sistema operativo de Google, Android, y después de las primeras pruebas, podemos comenzar a imaginar quién saldrá vencedor de la batalla entre el ya consolidado Iphone de Apple y los nuevos teléfonos basados en Android.
Dos filosofías totalmente diferentes: la rigidez y control absoluto de Apple sobre su hardware y software, o la apuesta por el código abierto y el "todo vale" de Google.
Netphones móviles
Pero, ¿qué mercado están intentando dominar estas dos empresas? Se trata de un nuevo tipo de teléfono móvil que no puede ser catalogado como smartphone a pesar de contar con muchas de sus características. La novedad reside en que la mayor parte de sus funciones avanzadas requiere una conexión a Internet.
Tanto el Iphone como ahora los terminales dotados del sistema operativo Google Android pueden ser clasificados como "netphones móviles", ya que, a pesar de no estar pensados para realizar llamadas a través de Internet mediante tecnología VoIP, el resto de utilidades dependen de una u otra manera de un servicio disponible mediante una conexión HSDPA, UMTS, o GPRS.
Diferentes filosofías
Aún teniendo la misma idea respecto al modo de funcionamiento del terminal, Apple y Google piensan en la manera de abordar este concepto de maneras totalmente opuestas: mientras que Apple apuesta por seguir su filosofía de controlar absolutamente todo lo referente a hardware y software, ofreciendo al comprador un producto cerrado en el que puede controlar hasta el último detalle de la experiencia del usuario, Google opta por abrir el código y que el sistema operativo del teléfono (y por ende la evolución tecnológica del mismo) vaya evolucionando a través de aportaciones de una comunidad de programadores y empresas no controladas por ellos.
Esto tiene ventajas e inconvenientes en ambos casos, pero todo parece indicar que Apple tiene la sartén por el mango y no la piensa soltar. Veamos por qué.
Dictadura vs Anarquía
El control férreo de Apple sobre todo lo concerniente a su Iphone es un arma de doble filo. Por un lado, limita las posibilidades de expansión y evolución del software y de las capacidades del móvil. De hecho, muchos usuarios optan por "liberar" el móvil (Jailbreak) para poder instalar aplicaciones fuera del control de Apple.
Aplicaciones tan útiles como un programa para enviar vídeo a un servidor streaming en tiempo real, un excelente programa de retoque de imágenes, y muchas otras. El gran problema es que una vez desbloqueado el teléfono, no se pueden descargar aplicaciones de la iTunes Store, que también tiene una gran oferta.
Pero a cambio, desde el punto de vista comercial, esto supone una enorme ventaja sobre sus competidores, ya que puede centralizar esfuerzos y conseguir ser el único distribuidor de software, música, y vídeo para su terminal, a diferencia de los terminales con Google Android.
Y es que el punto fuerte de los Android es también su principal flaqueza comercial. Si permites que todo el mundo cree aplicaciones para ti sin apenas control sobre la oferta, vas a tener también mucha competencia en lo referente a la oferta de contenidos y servicios. Así, Apple, en vez de enfrentarse a un conglomerado potente como Google aliado con alguna productora de contenidos internacional, se va a enfrentar a un grupo disperso de empresas que van a hacerse la competencia entre ellas.
Tampoco se controla el hardware, ya que Google permite que varias compañías creen móviles con su sistema operativo, lo cual hace todavía más difícil acotar la experiencia del usuario.
Además, la evolución descontrolada del software puede ser una jugada que puede salirle mal a Google, ya que si bien puede progresar mucho más rápido, también lo puede hacer por caminos muy diferentes, como pasa con las distribuciones de Linux, causando que se creen diferentes ramas de Android y que existan incompatibilidades entre software y sistema operativo.
En resumen, Apple parece haber dado con la fórmula magistral para los netphones, y Google está obligada a tener las ideas muy, muy claras si quiere llegar a competir contra la manzana.
Está llegando al mercado el T-MObile G1, el primer teléfono móvil con sistema operativo de Google, Android, y después de las primeras pruebas, podemos comenzar a imaginar quién saldrá vencedor de la batalla entre el ya consolidado Iphone de Apple y los nuevos teléfonos basados en Android.
Dos filosofías totalmente diferentes: la rigidez y control absoluto de Apple sobre su hardware y software, o la apuesta por el código abierto y el "todo vale" de Google.
Netphones móviles
Pero, ¿qué mercado están intentando dominar estas dos empresas? Se trata de un nuevo tipo de teléfono móvil que no puede ser catalogado como smartphone a pesar de contar con muchas de sus características. La novedad reside en que la mayor parte de sus funciones avanzadas requiere una conexión a Internet.
Tanto el Iphone como ahora los terminales dotados del sistema operativo Google Android pueden ser clasificados como "netphones móviles", ya que, a pesar de no estar pensados para realizar llamadas a través de Internet mediante tecnología VoIP, el resto de utilidades dependen de una u otra manera de un servicio disponible mediante una conexión HSDPA, UMTS, o GPRS.
Diferentes filosofías
Aún teniendo la misma idea respecto al modo de funcionamiento del terminal, Apple y Google piensan en la manera de abordar este concepto de maneras totalmente opuestas: mientras que Apple apuesta por seguir su filosofía de controlar absolutamente todo lo referente a hardware y software, ofreciendo al comprador un producto cerrado en el que puede controlar hasta el último detalle de la experiencia del usuario, Google opta por abrir el código y que el sistema operativo del teléfono (y por ende la evolución tecnológica del mismo) vaya evolucionando a través de aportaciones de una comunidad de programadores y empresas no controladas por ellos.
Esto tiene ventajas e inconvenientes en ambos casos, pero todo parece indicar que Apple tiene la sartén por el mango y no la piensa soltar. Veamos por qué.
Dictadura vs Anarquía
El control férreo de Apple sobre todo lo concerniente a su Iphone es un arma de doble filo. Por un lado, limita las posibilidades de expansión y evolución del software y de las capacidades del móvil. De hecho, muchos usuarios optan por "liberar" el móvil (Jailbreak) para poder instalar aplicaciones fuera del control de Apple.
Aplicaciones tan útiles como un programa para enviar vídeo a un servidor streaming en tiempo real, un excelente programa de retoque de imágenes, y muchas otras. El gran problema es que una vez desbloqueado el teléfono, no se pueden descargar aplicaciones de la iTunes Store, que también tiene una gran oferta.
Pero a cambio, desde el punto de vista comercial, esto supone una enorme ventaja sobre sus competidores, ya que puede centralizar esfuerzos y conseguir ser el único distribuidor de software, música, y vídeo para su terminal, a diferencia de los terminales con Google Android.
Y es que el punto fuerte de los Android es también su principal flaqueza comercial. Si permites que todo el mundo cree aplicaciones para ti sin apenas control sobre la oferta, vas a tener también mucha competencia en lo referente a la oferta de contenidos y servicios. Así, Apple, en vez de enfrentarse a un conglomerado potente como Google aliado con alguna productora de contenidos internacional, se va a enfrentar a un grupo disperso de empresas que van a hacerse la competencia entre ellas.
Tampoco se controla el hardware, ya que Google permite que varias compañías creen móviles con su sistema operativo, lo cual hace todavía más difícil acotar la experiencia del usuario.
Además, la evolución descontrolada del software puede ser una jugada que puede salirle mal a Google, ya que si bien puede progresar mucho más rápido, también lo puede hacer por caminos muy diferentes, como pasa con las distribuciones de Linux, causando que se creen diferentes ramas de Android y que existan incompatibilidades entre software y sistema operativo.
En resumen, Apple parece haber dado con la fórmula magistral para los netphones, y Google está obligada a tener las ideas muy, muy claras si quiere llegar a competir contra la manzana.
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